miércoles, 13 de marzo de 2013
NO LLORES POR MI ARGENTINA, NO LLORES POR MI PAPA BERGOGLIO
Cambio de Papa con el nombre
Francisco I, Su nueva Santidad desde hoy 13 de marzo de 2013. Cubierta la
vacante petrina, nada ha cambiado aparentemente en la cristiandad, salvo que
ese nuevo estilo que conlleve el nuevo Papa haga un apostolado de una auténtica
evangelización en la que el buen ejemplo sea la predica principal, y que su
reinado como Vicario de Pedro sobre la Tierra no sea únicamente el simple y
habitual paseo papal de peregrino, sino aquello que realmente les hubieran
gustado a Jesucristo y a la Virgen Maria. Al final son los hechos y no las palabras
es lo que cuentan en la historia de los Papas, y tanto las plegarias como las
devociones se las llevan el viento. Si con su influencia en el mundo se
consigue más justicia y más dignidad, entonces la acción papal habrá valido la
pena, aunque conociendo la trayectoria de muchos Papas, las dudas quedan en el
aire, y el tiempo terminará por poner las cosas en su sitio. Quizás la clave de
su acción papal nos la proporcione el propio nuevo Santo Padre Francisco I, en
sus propias palabras expresadas por él mismo:
“No tengo todas las
respuestas. Ni tampoco todas las preguntas. Siempre me planteo más preguntas,
siempre surgen preguntas nuevas. Pero las respuestas hay que ir elaborándolas
frente a las distintas situaciones y también esperándolas. Confieso que en general, por mi temperamento, la primera
respuesta es equivocada. Frente a una situación, lo primero que se me ocurre es
lo que no hay que hacer. Es curioso, pero me sucede así. A raíz de ello,
aprendí a desconfiar de la primera reacción. Ya mas tranquilo, después de pasar
por el crisol de la soledad, voy acercándome a lo que hay que hacer. Pero de la
soledad de las decisiones no se salva nadie”.
Del
Libro: “El jesuita (Conversaciones con el cardenal Jorge Bergoglio)”
Etiquetas:
FRANCISCO I,
JORGE BERGOGLIO,
SU SANTIDAD EL PAPA
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